Esta receta me ha llegado a mi e-mail después de habérmela dedicado en Facebook por mi Padrino G.
Él es un especialista en pizzas y cocas. Le encanta pringarse las manos con la masa y los viernes por la noche, cuando enciende el horno, todos sabemos qué va a cocinar G.
Ésta es una receta como una "pequeña crítica" a mi Blog... y es que G. no está muy de acuerdo en que solo publique recetas dulces, porque dice que "¿dónde está la dieta mediterránea?", pero ya avisé que era mi especialidad, lo que más me gusta cocinar, aunque no descarto subir alguna vez una receta que no sea "para engordar".
Esta vez en honor a él, ¡publico su sanísima receta! He de reconocer que las fotos son suyas, y la receta literalmente también. Esta vez el mérito no es mío.
Ingredientes:
Para la masa:
- 500 g. de harina normal
- 200 ml. de agua
- 100 ml. de aceite de oliva
- Una pastilla de levadura fresca
- Una cucharadita de sal
Verduras:
- 3 cebollas tiernas
- 3 pimientos verdes italianos
- 5 tomates rojos (se les quita el máximo posible de semillas)
- champiñones
- aceite para aliñar las verduras
- orégano y sal al gusto
Preparación:
1. Se vierte en un bol 400 gramos de harina y se hace una agujero en el centro dándole forma de volcán.
2. Templar los 200 mililitros de agua a menos de 40ºC (que esté tibia pero que no queme, para deshacer la levadura).
3. Disolver la levadura en el agua tibia y esperar 10 minutos.
4. Añadir los 200 ml de agua con la levadura disuelta, los 100 ml de aceite y una cucharadita de sal al volcán de harina.
5. Amasar todo hasta que no se nos pegue a las manos.
6. Espolvoreamos más harina en el mármol de la encimera (limpio please) y se coloca la masa encima.
7. Amasamos añadiendo poco a poco más harina, espolvoreándola hasta que no se pegue al mármol.
8. Hacemos una bola con la masa, la ponemos encima de una madera (el mármol es frío y la masa sube peor) y la tapamos con un paño de cocina.
9. Se deja subir la masa a una temperatura ambiente de unos 25º, si hace más frío le costará subir como una hora, a 25º-28º subirá en una media hora. No es recomendable que la temperatura supere los 32º o la masa subirá mal.
10. La masa ha subido cuando la toquemos con un dedo y a los pocos segundos la huella desaparece.
11. Mientras sube la masa se trocean las verduras en una picada del tamaño de 5 mm. aproximadamente.
12. Cuando la masa ha subido, se espolvorea más harina en el mármol (así se gastan el total de los 500 g.), se estira la masa con la ayuda de un rodillo, sin apretar mucho para que no salga todo el aire y quede esponjosa.
13. Se pasa la masa estirada a una bandeja de horno, protegida por papel vegetal (o papel de aluminio si no tenemos vegetal, pero pintado de aceite para que la masa no se pegue).
14. Nos pringamos las manos con aceite y marcamos con los dedos toda la superficie de la masa.
15. Se espolvorea con orégano y se mete la masa sola al horno, precalentado anteriormente, a 200ºC durante 5 minutos. No tiene que coger color, este paso es solo para que se haga una costra en la superficie y que la verdura no empape la masa, porque luego se queda cruda.
16. Se saca la masa del horno, y se añaden las verduras. Se aliña todo con un hilo de aceite de oliva, sal y orégano al gusto.
17. Meter la coca al horno unos 25-30 minutos, hasta que la verdura esté dorada y el borde de la masa morenito.
Esta coca como más gusta es templada o fría. Perfecta para llevar de excursión. Una vez hecha, aguanta unos tres días fuera de la nevera.
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Parece que la receta de G. tuvo mucho éxito cuando la llevo a su almuerzo, porque nada más hay que ver la foto de cómo quedaron los platos.
¡Muchas gracias G. por tu receta!
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